lunes, 17 de febrero de 2014

Las enfermedades mentales, las grandes olvidadas

Cuando se publicó el GBD 2010, en diciembre de 2012, las enfermedades mentales pasaron prácticamente desapercibidas pese a que, como insiste el estudio liderado por Whiteford, son los trastornos que tienen un mayor impacto en la salud en todo el mundo. El problema es que, a la hora de elaborar los informes médicos, la enfermedad mental nunca se registra como una causa de muerte, aunque sea su principal responsable. En el propio GBD, las muertes prematuras ocasionadas por los trastornos mentales han sido anotadas con relación a la causa física de la muerte, aunque, como insisten los investigadores, ésta haya sido provocada por la enfermedad mental. De acuerdo al protocolo del GBD los suicidios son registrados como lesiones, aunque la mayoría son el resultado último de un trastorno mental. Por otro lado, sólo las sobredosis son registradas como muertes ocasionadas por el abuso de drogas ilegales, cuando es sabido que el abuso de sustancias provoca la muerte por muchas otras vías.

En toLos autores creen que es necesario cambiar el enfoque a la hora de estudiar los trastornos mentales y las adicciones pues sólo dándonos cuenta de la importancia real que tienen, podremos tratar eficazmente éstos. “Pese a los costes personales y económicos, e incluso en los países desarrollados, el tratamiento suele comenzar muchos años después de que aparezca el trastorno”, asegura el doctor Whiteford en la nota de presentación del estudio. “En todo los países, el estigma que rodea a las enfermedades mentales y el abuso de sustancias constriñe el uso de los recursos disponibles y provoca ineficiencias en la distribución de la financiación y las intervenciones”.

Según un estudio elaborado en 2004 por el doctor Koen Demyttenaere entre el 35% y el 50% de los pacientes con serios desórdenes mentales no han recibido tratamiento en el último año, una cifra que se eleva a entre el 76 y el 85% en los países en desarrollo.


miércoles, 5 de febrero de 2014

Ajedrez

Ajedrez, algo más que un juego.
Una partida de ajedrez es mucho más que un simple juego porque equivale, en cierta medida, a recrear EL GRAN TEATRO DE LA VIDA, y de la observación atenta de nuestro modo de maniobrar en el juego, podemos aprender mucho de nosotros mismos, de nuestros errores y de nuestros propios patrones psicológicos.

La respuesta emocional "sana"

La mayor parte de nuestro día, lo pasamos hablando desde nuestra parte más racional. Aunque en nuestro telón de fondo, siempre están las emociones que van apareciendo en el escenario como protagonistas, cuando les dejamos. 

Para tener unas emociones saneadas nos hemos de permitir sentir todas las emociones, tanto las agradables ( alegría, curiosidad, amor...) como las no tan agradables ( tristeza, rabia, miedo...). y no sólo permitirlas sentir, sino dejar que terminen la curva natural que realizan. 

Emoción, pensamiento y cuerpo van ligados. Si me dejo sentir la emoción en mi cuerpo, la observo, identifico qué emoción es, la proceso, la expreso si es necesario, veré como poco a poco se va disipando. Si me permito este recorrido, lograré un equilibrio emocional. Si no finalizamos el ciclo, lo que ocurre es que bloqueamos la emoción dentro de nuestro cuerpo y eso traerá importantes consecuencias en nuestra salud física y mental.